Etapa 1: Cap de Creus - El Port de la Selva

Para llegar a la punta del Cap de Creus -punto de inicio o final de la travesía Transpirenaica- desde el faro del Cap de Creus tomamos el sendero que baja por entre las rocas en clara dirección E. Las señales blancas y rojas del GR nos ayudan a identificar el camino y en aproximadamente 10 minutos llegamos a la punta donde está pintado el círculo blanco y rojo que nos marca el punto extremo del GR 11. Nos encontramos en la punta más oriental de la Península Ibérica, aquí es donde los Pirineos, la gran cordillera, se funden con el mar Mediterráneo.

Muchos excursionistas que abordan la travesía Transpirenaica de mar a mar bajan hasta el mar y se remojan las manos en el Mediterráneo, gesto que repiten cuando terminan su aventura en las aguas del Cantábrico. Incluso hay quien recoge un poco de agua con algún recipiente, agua que más adelante será devuelta al mar, en el Cantábrico, simbolizando el punto y final de la travesía.

Así pues, empezamos la apasionante travesía Transpirenaica en la (1) punta del Cap de Creus (0:00h - 20m). Desde este punto deshacemos el camino por entre las rocas hasta llegar nuevamente al (2) faro del Cap de Creus (0:12h - 80m). Rodeamos el faro dejándolo a nuestra derecha y bajamos por un camino y unas escaleras que nos llevan hasta una curva de la carretera. Durante este primer tramo de esta primera etapa, nos vamos cruzando repetidamente con la carretera del Cap de Creus. Debemos estar atentos en todo momento a las señales blancas y rojas del GR 11 y los postes indicadores de "Port de la Selva", que nos ayudarán a seguir el itinerario en todo momento.

Llegamos a un punto donde dejamos definitivamente atrás la carretera y pasamos por el lado del Mas dels Rabassers de Baix y seguidamente por el (3) Mas dels Rabassers de Dalt (1:10h - 115m), que actualmente se encuentra en ruinas. Avanzamos por un pista de tierra cómoda y agradable. Pronto llegamos a la zona del Puig Melus (151m) que nos queda a nuestra derecha (N) y a continuación nos encontramos el (4) desvío de cala Tavellera (1:50h - 125m). Antiguamente el trazado del GR 11 bajaba hacia la derecha hasta esta cala (NO). El trazado actual, sin embargo, continúa recto por la pista de la izquierda (O). Pocos metros más adelante dejamos esta pista, que gira hacia la izquierda, y nosotros continuamos por un sendero (O). El camino sube y baja, cruzamos el arroyo de Nou Recs -también llamado arroyo de cala Tavellera-, y pasamos por el lado de las ruinas del Mas Vell. Llegamos a una pista más ancha y justo a la derecha vemos el Mas Paltré. Nosotros cruzamos la pista y bajamos hacia el (5) Rec de Talabre (2:50h - 98m), que cruzamos.

Subimos por el lomo de una colina y luego bajamos hasta (6) Sant Baldiri de Tavellera (3:05h - 135m), una ermita originaria del siglo X, aunque la construcción actual que podemos ver es posterior. Continuamos por la pista en dirección O. Después de una serie de desvíos y bifurcaciones -nosotros seguimos siempre las señales blancas y rojas del GR- pasamos por el lado de las ruinas del Mas Puignau, que dejamos atrás a nuestra derecha. Nos encontramos en el punto más elevado de esta etapa (190m). A partir de aquí empezamos a perder altura suavemente en dirección NO, hacia el Port de la Selva. Entramos en Port de la Selva por la zona de la urbanización de las Figuerasses y vemos, a nuestra derecha, el Rec de la Tamariua y la cala homónima al fondo (N). Rodeamos la colina de la Carbonera (121m) por la derecha y damos toda la vuelta a la Punta de la Creu. Finalmente llegamos al puerto de (7) El Port de la Selva (4:00h - 5m).

El Port de la Selva es un pueblo marinero muy bonito y lleno de encanto, que existe como núcleo independiente desde el año 1787, originariamente sólo era el puerto de los pescadores de la Selva de Mar. Port de la Selva tiene una población de unos 1000 habitantes repartidos en los diferentes núcleos de su término municipal, y su economía está basada en el turismo y en la pesca.